Entre las flores y plantas que la madre naturaleza nos
proporciona para aliviar nuestro resfriado está el maravilloso jengibre.
Tradicionalmente,
el jengibre ha sido, y es, una de las plantas más populares en la medicina
tradicional china; esto es debido a que se trata de un anti inflamatorio
natural que nos ayuda a combatir enfermedades respiratorias, inflamatorias, así
como artrosis y problemas digestivos. Esta planta, cultivada en zonas cálidas y
sur Asia e india de dónde es originaria y se cultiva desde hace más de 5000
años
Tiene un
particular sabor picante y es muy aromático de modo que se recomienda un
consumo moderado y siempre es recomendable tomarlo acompañado de otros
alimentos. El jengibre es además rico en
aceites esenciales, vitaminas, minerales, antioxidantes y aminoácidos. Se ha
demostrado que tiene efectos beneficiosos para aliviar el malestar gástrico,
así como ayuda a mejorar dolores menstruales, migrañas, tienen efectos que son
beneficiosos para prevenir el cáncer de colon.
Es ideal para
aliviar los síntomas típicos del resfriado (congestión, escalofríos, tos,
etc.), como expectorante (es decir, para calmar la tos y eliminar la flema) y
la sinusitis.
En su raíz encontramos
tres componentes principales.
-SHOGAOLES, con propiedades analgésicas, antihistamínicas,
antioxidantes, antitusivas, antipiréticas (bajan la fiebre), antiulcerosas,
sedativas, hipertensivas, estimulantes de la motilidad intestinal.
-GINGEROLES, además de las anteriores aportan propiedades
antiinflamatorias, colagogas, cardiotónicas, antieméticas (contra vómitos)
-ACEITES ESENCIALES
Pero como todo lo natural también tiene sus
efectos secundarios. No se debería tomar si las afecciones del aparato
digestivo para las que resulta favorable, como úlceras, gastritis, colitis o
enfermedad de Crohn, están activas ya
que en caso de hacerlo podría hacer más agudo el dolor.
Puede interferir
en la formación hormonal del feto durante el embarazo, por lo que si queremos
tomarlo para reducir las náuseas es
conveniente que previamente lo consulte con su ginecólogo que será quien le
indique si puedes tomarlo o no y de qué manera hacerlo. También hay que evitar
tomarlo si los sangrados durante la menstruación son muy abundantes para que no
aumente el riesgo de hemorragia.
Puede interferir
con respecto a los efectos de ciertos medicamentos para la diabetes problemas
circulatorios, es mejor consultar siempre con un especialista, ya que el
jengibre reduce y altera los efectos de los fármacos para tratar estas
enfermedades.
Puede provocar reacciones
alérgicas sobre pieles sensibles
El jengibre puede
ser encontrado tanto en fresco, seco como en polvo. La forma más habitual de
encontrarlo y consumirlo es a través de infusiones.
Para poder hacer
una preparación de jengibre, lo mejor es hacer uso de un litro de agua por cada
trozo de raíz. Cuando el agua esté hirviendo, entonces podemos incorporar el
jengibre y lo dejaremos alrededor de 3 o 4 minutos para que tome todo el sabor.
Posteriormente si lo desea, puede colocar un poco de miel para endulzar, limón,
naranja o incluso un poco de manzanilla para darle otro sabor.
Otra forma de
poder consumir jengibre, siempre con la debida precaución, es a través de aceites
esenciales, zumos o cápsulas.
En el caso de los
aceites como su concentración es mucho mayor, no tiene que superar la toma de 9
gotas de aceite al día que hay que repartir durante las 24 horas y no tomar
todas de un golpe.
En las cápsulas
todo depende un poco de la composición pero se suelen tomar cada 8 horas
habitualmente durante un período determinado de tiempo.
Si se trata de
usar el jengibre también en las comidas, entonces la mejor forma de hacerlo es
utilizándolo para aliñar ensaladas o incluso sazonar algún tipo de carne. Es un
ingrediente bastante frecuente en lo que se refiere la cultura asiática, por
eso no lo deje de lado y pruebe los sabores nuevos.
Para los que
deseéis poder probar estas propiedades curativas que tiene el jengibre, lo más
habitual es tomarlo en infusión. De hecho el té de jengibre es bastante popular
y podemos encontrar varias recetas para su elaboración
INGREDIENTES
1 o 2 cucharadas de miel pura
3 rodajas de raíz de jengibre de dos centímetros o un
sobrecito de jengibre seco granulado.
El zumo de media naranja exprimida
El zumo de medio limón exprimido
INSTRUCCIONES
Comenzamos lavando y pelando un trozo de raíz de jengibre
que cortamos en dos o tres rodajas.
Lo colocamos en una taza aplastando con un tenedor, no
demasiado.
Agregamos una buena
cucharada de miel de abejas sólida, el
zumo de la media naranja y el del medio limón.
Colocamos agua al fuego y cuando hierva le sumamos la taza y
tapamos.
Dejamos la taza tapada unos diez minutos o más y servimos.
Comentarios
Publicar un comentario